Síndrome de Wilkie

El síndrome de Wilkie es una enfermedad adquirida infrecuente, ocasionada por la compresión extrínseca del duodeno por un estrechamiento del ángulo aorto-mesentérico. Existen reportes de casos desde el 1861 y se han publicado múltiples artículos al respecto por tratarse de una patología sumamente infrecuente y por presentar un desafío diagnóstico la mayoría de las veces. Esta condición se ha asociado frecuentemente a pérdida de peso, trauma severo o posición de decúbito prolongada en pacientes crónicamente enfermos.  Se debe sospechar esta condición ante un síndrome obstructivo abdominal con evidencia de dilatación  de estómago y duodeno proximal por métodos de diagnóstico por imágenes o endoscopía. Este síndrome tiene una forma de presentación aguda y crónica, siendo esta última la más frecuente. Se propone como tratamiento inicialmente medidas conservadoras, existiendo alternativas quirúrgicas ante el fracaso de las mismas. A continuación, el caso clínico de un paciente en cuidados críticos que respondió favorablemente a medidas conservadoras.

 

Caso clínico

  

Servicio de unidad de cuidados intensivos solicita la evaluación por Cirugía General de un paciente de 49 años de edad, con antecedente de Diabetes Mellitus tipo II y fractura por aplastamiento de cuerpos vertebrales D7 y D8, cursando internación por sepsis a punto de partida de infección de partes blandas en miembro inferior derecho con siembra secundaria en parénquima pulmonar por presentar distensión abdominal y falta de eliminación de gases y materia fecal de 48hs de evolución. Al examen físico, paciente gravemente enfermo, en ARM, palidez generalizada, francamente adelgazado, abdomen distendido, timpánico a la percusión, doloroso a la palpación profunda generalizada, sin patología relevante al examen proctológico, se constata ampolla rectal vacía. Se observa en la tomografía de abdomen importante distensión de la cámara gástrica (Fig.1), así como una disminución del ángulo interaortomesentérico (Fig.2)

Se sugiere suspensión de opioides, ayuno absoluto y se coloca sonda nasogástrica con débito inicial de 1200ml de carácter gastrobilioso.



Figura 1. Tomografía de abdomen en evaluación inicial.

 

 Figura 2. Disminución del ángulo aorto-mesentérico.


 

Posteriormente el paciente presenta una evolución favorable, con disminución progresiva del débito por  sonda nasogástrica, instaurando nutrición enteral por sonda nasoyeyunal al cuarto día de la evaluación inicial, siendo extubado al décimo día y presentando buena tolerancia a dieta blanda fraccionada. Recibe el alta médica con buena tolerancia a dieta general.

 

Discusión

 

El síndrome de Wilkie, también conocido como síndrome de la pinza aorto-mesentérica, es una condición rara causada por la oclusión de la tercer porción del duodeno por un ángulo demasiado agudo entre la arteria mesentérica superior y la arteria aórta abdominal (Fig.3). Fue descripto inicialmente por Rokitansky en 18611, sin embargo no adquirió su conocido epónimo hasta el año 1921, por una publicación de David Wilkie2 reportando resolución quirúrgica de una serie de 75 casos de lo que llamo íleo duodenal crónico.  La incidencia en la población general se ha reportado entre 0.0024% y 0.34%3. Se ve en casos donde el ángulo entre AAA y AMS es de 6° a 25° (valor normal: 38°-56°). Su etiología puede estar en relación con malformaciones anatómicas o pérdidas de tejido adiposo que alteran el ángulo aortomesentérico4, otras causas menos frecuentes son complicaciones postoperatorias que favorecen la alteración mencionada (adherencias, pérdida de peso postoperatoria, cirugía de escoliosis,etc.).

Figura 3. Ángulo Aorto-Mesentérico.



El síndrome puede presentarse con un cuadro agudo o con tendencia a la cronicidad5 , siendo los síntomas de oclusión intestinal alta los más comúnmente encontrados. Los motivos de consulta de estos pacientes incluyen: saciedad precoz, náuseas y dolor epigástrico posprandial, vómitos biliosos, pirosis, reflujo gastroesofágico y pérdida de peso. Los síntomas característicamente se exacerban posterior a la ingesta y alivian con los vómitos, decúbito prono o posición de plegaria mahometana6. 

El diagnóstico se basa en la sospecha clínica, sin embargo es necesaria la confirmación imagenológica7. En una simple radiografía abdominal de pie, se puede sospechar ante importante distensión gástrica y duodenal, este mismo estudio con aporte de contraste oral es aún más sensible, sin embargo, al igual que la endoscopía, no permiten caracterizar el agente causal de la obstrucción extrínseca. El gold-standard en la actualidad es la Angio-Tomografía Computarizada ya que se trata de un método poco invasivo que permite objetivar de manera exacta las relaciones de la pinza aortico-mesentérica, su repercusión sobre el duodeno y caracteriza un eventual factor anatómico predisponente. En un estudio de casos y controles que caracterizó la angulación de la pinza aórtico-mesentérica8 se demostró que en pacientes con Síndrome de Wilkie el ángulo entre AAA y AMS  era de 9° (entre: 8–10) y en controles de 44° (entre: 28–65). La distancia media entre estas estructuras a nivel de la tercera porción del duodeno fue de 8.1 mm (entre: 5.7–11 mm) en los casos y de 19.6 mm (entre: 13.4–34.3 mm) en controles.

El tratamiento inicial recomendado suele ser conservador, ante un caso agudo instaurar descompresión a través de una sonda nasogástrica, posteriormente probando tolerancia a líquidos con antieméticos y antiespasmódicos en seguimiento. En pacientes gravemente enfermos y desnutridos puede ser útil una sonda nasoyeyunal como terapia nutricional, lo cual incluso se ha reportado útil como tratamiento definitivo en un caso9.

La cirugía se encuentra indicada para aquellos que no responden a un manejo conservador. Se han descripto múltiples técnicas abiertas, entre ellas gastroyeyunostomía, duodenoyeyunostomía, cirugía de Strong (sección del ligamento de Treitz), sin embargo las técnicas laparoscópicas han ganado amplio terreno10.

 

Bibliografía

1.      Rokitansky CV. Lehrbuch der patologischen Anatomie. 3.rd ed. Vienna: Braumuller, 1861;3 p. 187.
2.      Wilkie DP. Chronic duodenal ileus. Br J Surg. 1921;9:204.
3.      Mathenge N, Osiro S, Rodriguez II, et al. Superior mesenteric artery syndrome and its associated gastrointestinal implications. Clinical Anatomy.2014; 27(8), 1244-1252.
4.      Akin JT Jr, Skandalakis JE, Gray SW. The anatomic basis of vascular compression of the duodenum. Surg Clin North Am.1974:1361---70
5.      Cohen LB, Field SP, Sachar DB. The superior mesenteric artery syndrome. The disease that isn’t, or is it? J Clin Gastroenterol. 1985;7:113---6.
6.      Record JL, Morris BG, Adolph VR. Resolution of refractory superior mesenteric artery syndrome with laparoscopic duodenojejunostomy. The Ochsner Journal. 2015 ;15(1):74-78.
7.      Hines RH, Gore RM, Ballantyne GH. Superior mesenteric artery syndrome. Diagnotic criteria and therapeutic approaches. Am J Surg 1984; 148: 630-632.
8.      CT angiography of superior mesenteric artery syndrome. E Konen, M Amitai, S Apter, A Garniek, G Gayer, S Nass, and Y Itzchak American Journal of Roentgenology 1998 171:5, 1279-1281.
9.      KH Dedrick Chan, Successful nutritional therapy for superior mesenteric artery syndrome Singapore Med J 2012; 53(11) : e233
10.  Yao SY, Mikami R, Mikami S. Minimally invasive surgery for superior mesenteric artery syndrome: A case report. World J Gastroenterol.2015;21(45):12970–12975.

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